ÉL MATÓ A UN POLICÍA MOTORIZADO + Celestial Bums
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ÉL MATÓ A UN POLICÍA MOTORIZADO
Autopistas de guitarras y melodías indelebles. Emotivas explosiones de verdad y belleza. Ladrillos de armonía cementados con distorsión y amistad. ¿Has oído hablar del nuevo magnetismo? ¿Escuchaste la leyenda que dice que en el 2012, esto se acaba?
Desde la ciudad de la Plata, música para frenar el apocalipsis. +info: www.elmato.com.ar
CELESTIAL BUMS
Porque el rock no solamente es música. Implica diferentes disciplinas de expresión artística. Es música, claro, y también interpretación y recitación. Así que también es teatro y poesía. Por lo tanto, el rock es el vehículo perfecto para que las dos fuentes de las que bebe el arte fluyan y se unan: Lo Dionisíaco y lo Apolíneo. Lo embriagador y lo onírico. Cuando el rock se interpreta y se recita, cuando los músicos no tocan, ni cantan, sino que actúan, el rock debe considerarse, más que música, un arte supremo. El rock es nuestro legado como Europeos, es nuestra manera de dar rienda suelta a nuestras necesidades expresivas de la manera más primaria. El rock te retuerce de dolor y de pasión. Un ritual que hace poco que nació, pero que recoge sus ingredientes esenciales de los tiempos de la tragedia griega. Y el arte es la finalidad suprema de nuestra existencia aquí y ahora. Es la manera más noble de expresar el alma. Es el camino para la realización personal y es el sagrado ritual.