MACHO
RockAlgunos de mis colegas se asustaron cuando les conté que iba a encargarme de la producción de MACHO. Me hablaron de su torpeza técnica, de sus monosílabos, de sus infantiloides pretensiones intelectuales (rozando la oligofrenia). En resumen, todo el mundo me dijo que eran unos putos losers gilipollas. Pero Alguien puso pasta sobre la mesa. Subí en su tren. Subí en el jodido tren de MACHO y todos los prejuicios se desvanecieron en el aire como una burbuja de Standard & Poor’s. Estos cuatro chicos, amables, cordiales, siempre atentos, se desenvuelven con soltura con sus instrumentos, su ritmo es trepidante, tienen un don para la melodía. Estos cuatro chicos siempre están dispuestos a aprender algo nuevo, a experimentar con nuevas tecnologías. Fuera del estudio, en los retretes de Universidad, tras los setos del club de Polo, no sé a qué se dedican; pero debo decir que entre las cuatros jodidas paredes del estudio se han comportado como auténticos profesionales. Con un par. Bajo la C. ¿Definir su música? Toma nota: El rock primitivo y carente de artificios de MACHO te hará sacudir las caderas y el lóbulo frontal. MACHO hace sudar las paredes, las aves migran. He visto a hombres llorar en rincones y a mujeres en celo poseídas por demonios. MACHO es la única banda capaz de alterar la rotación de la tierra. MACHO existe desde el principio de los tiempos. Macho bebe en el bar de Lucas. MACHO está en tu ciudad AHORA. Cerca. Pendiente de ti…pendiente de ti.
Mario Eduardo Wilson González (Productor de MACHO)